Nuestra intención es formar un niño completo aquí y ahora; constructor activo de sus relaciones en cada una de sus etapas, no sólo un proyecto futuro a devenir, a construir; crítico de su realidad con capacidad para transformarla; capaz de interaccionar con el adulto, con el entorno y con su propio cuerpo.

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Un niño activo, como un ser de iniciativas, que acciona y no sólo reacciona, abierto al mundo y al entorno social del cual depende. Permitiéndole una gran libertad de movimientos, reconociéndole sus competencias, favoreciéndole su autoestima, en un espacio seguro y contenedor preparado

por el adulto. Dándole la posibilidad que en cualquier actividad que se le proponga o inicie por sí mismo, tenga el tiempo necesario para que pueda comprender la situación, tomar conciencia de ella y formar una actitud propia.

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Formar un niño que desde su individualidad, sus propias capacidades y jugando, pueda compartir, cooperar y trabajar con los otros; logrando desarrollar una comunicación gestual, corporal y/o verbal que le permita expresarse y comunicarse significativamente.